En México viven 29.2 millones de niños y adolescentes de entre 5 y 17 años, de los cuales 3.2 […]
En México viven 29.2 millones de niños y adolescentes de entre 5 y 17 años, de los cuales 3.2 millones se ven orillados a trabajar en precarias condiciones, ante la difícil situación económica que enfrentan sus familias, por lo que, en nuestro país por cada 100 niños y adolescentes, 11 tienen que trabajar.
Los contrastes que existen entre el norte, centro y sur del país son de tal magnitud que en Guerrero por cada 100 niños que habitan el estado, 17 se ven forzados a trabajar frente los altos niveles de pobreza, y en cambio en la Ciudad de México apenas son 5 de cada 100.
En Coahuila, a pesar de ser uno de los estados con menos informalidad, con menos pobreza y con un avanzado desarrollo económico, este problema sigue latente y a continuación les compartiremos algunos datos.
Actualmente en el estado viven más de 730 mil niños y adolescentes, de los cuales 57 mil tienen que trabajar, 58% son niños y 42% son niñas, 4 de cada 10 niños que actualmente están trabajando no van a la escuela, y preocupa que los 6 que si asisten, lo hacen forzando su integridad física y mental, poniendo en riesgo su desarrollo académico en el futuro inmediato.
El 45% de estos niños trabaja en quehaceres del hogar bajo condiciones peligrosas, ya seas sustituyendo a los padres en sus labores domésticas o apoyando en los negocios familiares exponiéndose a los riesgos que ello implica, un 36% trabajan en establecimientos cuya peligrosidad es demasiado elevada y no cuentan con el conocimiento ni el desarrollo pleno para ejercer estas funciones, y el dato más estremecedor es que el 19% tiene que trabajar sin contar con la edad legal permitida para trabajar (15 años).
El 14% de los niños y adolescentes que trabajan no reciben ingresos, el 47% apenas si reciben por su trabajo $2,640 al mes, el 29% ganan entre $2,640 y $5,280 mensuales y apenas el 9% puede acceder a más de $5,280, el salario promedio de los mexicanos.
Más allá de las políticas asistencialistas, se requieren políticas de largo plazo que busquen erradicar la pobreza desde la raíz a través del desarrollo y preparación de nuestros niños y jóvenes, no bastan solamente becas, se necesita una política económica que busque el desarrollo integral de las familias a través de un mejor salario y leyes más duras contra la explotación infantil.
Somos un proyecto del Consejo Cívico de las Instituciones, A.C. que promueve el análisis y la evaluación de indicadores técnicos y de percepción ciudadana que permitan incidir en mejores políticas públicas y mejorar la calidad de vida de la Laguna.